Reforma de vivienda minimalista en Zaragoza (antes y después)

En esta reforma nos propusimos crear un hogar sereno y funcional, donde cada detalle tuviese sentido. El primer paso fue sustituir el suelo original por un laminado Egger con acabado en madera clara, que aporta calidez y continuidad visual a toda la vivienda. Esta elección fue clave para unificar los ambientes y sentar las bases de una estética limpia, acogedora y atemporal.

La cocina, completamente renovada, se diseñó en blanco mate con un enfoque minimalista. La isla central se convierte en el corazón del espacio, tanto por su funcionalidad como por su presencia visual. Todo está pensado para que fluya sin esfuerzo: armarios sin tiradores, electrodomésticos integrados y superficies despejadas que se funden con el estilo del salón, decorado al estilo escandinavo con líneas rectas, tonos neutros y una iluminación suave que resalta la sencillez del conjunto.

El baño representa el toque más personal del proyecto. Apostamos por un diseño a medida en tonos verde oliva, con mobiliario hecho por encargo y acabados cuidados al milímetro. El resultado es un espacio elegante y original, con personalidad, que mantiene el equilibrio entre frescura y sofisticación sin romper con la armonía del resto de la vivienda.

¿Te agrada el resultado final de esta reforma? No dudes en pedir un presupuesto sin compromiso.